El comercio electrónico o ecommerce ha crecido fuertemente en los últimos años y de forma acelerada durante la pandemia. En plena cuarentena, en abril, la facturación por venta online en la Argentina creció un 84% en comparación con el promedio del primer trimestre del año. Las órdenes de compra aumentaron un 38% y la venta en unidades un 71%, según datos de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).
El hábito de comprar online se ha consolidado en 2020. “Como uno de los efectos colaterales de la pandemia, el comercio electrónico y los pagos digitales han tenido en estos 9 meses un impulso extraordinario, permitiéndonos avanzar lo que en una situación normal nos hubiese llevado tres o cuatro años”, señala a Infobae Hernán Seoane, Gerente General de la Cámara Argentina de Internet (CABASE).
Si tuviéramos que comparar, dice, el ecommerce ha tenido con la pandemia un catalizador similar al que tuvo el uso de cajeros y las tarjetas de débito con el corralito en 2001.
Con esta adopción del comercio electrónico en alza, se hace necesario tomar medidas de precaución para proteger los datos personales y la seguridad. En efecto, cuanto más conectados estamos, más crecen las estafas en línea.
En este sentido, es necesario saber cómo protegerse (y aplicarlo) para evitar ataques durante las fiestas, en donde los delincuentes informáticos estarán al acecho.
– Usar el sentido común. ¿Es posible una oferta tan espectacular? El sentido común es el principal escudo para evitar fraudes, phishing (suplantación de identidad) y otras estrategias delictivas. Es importante entender que, si vemos marcas de lujo o productos tecnológicos a precios extremadamente bajos, es posible que sea una estafa.
– Usar teclado virtual. “En el proceso de carga de los datos del medio de pago es importante usarlo y dudar ante errores de carga, y cualquier solicitud de reingreso de datos. A veces las conexiones con las pasarelas de pago tienen un mínimo delay, así que hay que evitar ´refrescar´ la sesión del navegador”, indica Zurdo.
– Conexión segura, siempre. Evitar las redes WiFi públicas que son más vulnerables al robo de información al tener pocas barreras de seguridad. Si no es posible evitar el uso de la conexión a una red pública, utilizar una solución VPN (Virtual Private Network) para cifrar los datos que se envían y se reciben.
– Software y antivirus actualizados. Protegerse con un antivirus no es solo descargarlo e instalarlo. Hay que configurarlo y realizar las actualizaciones necesarias. Asimismo, los sistemas operativos deben ser actualizados.
-Verificar la información del vendedor y de su sitio. Contar con información para saber quién es, sus datos fiscales, dirección y política de devoluciones, entre otros. Y, por supuesto, leer reseñas de otros compradores y conocer su reputación.
– “Alerta Phishing”. Es uno de los engaños más comunes. Llegan, por ejemplo, falsos mensajes asociados a regalos o facturas pendientes. El correo electrónico y WhatsApp son utilizados como vehículos para enviar phishing. “Se hacen pasar por reales con pretextos como que hemos recibido un regalo o que tenemos una factura pendiente de pago. Siempre suelen llevar un enlace que nos conduce a la web falsa. Nunca debemos entregar nuestros datos personales y menos las paswords o contraseñas”, señala Zurdo.
– Leé dos veces. Es importante analizar la redacción y errores gramaticales de los correos electrónicos y mensajes, como por ejemplo palabras mal escritas o URL sospechosas en promociones, cupones de descuento, sorteos navideños, mensajes de Whatsapp y de mensajería por RRSS, Instagram, TikTok, u otras redes sociales.
– Elegir tiendas virtuales confiables. En todas las temporadas de compras (o para eventos como el Hot Sale, o CyberMonday), los estafadores crean tiendas falsas para atraer posibles víctimas. Por eso, buscar calificaciones y reseñas, es una buena guía para detectarlo.
– Comprar solo en sitios web cifrados (HTTPS). Un sitio está cifrado cuando aparece un pequeño candado en la barra del navegador y el dominio empieza con “https://”. Todos los sitios legítimos en línea utilizan cifrado. Sin embargo, no es una garantía absoluta, pues cada vez más, los sitios fraudulentos adoptan el uso de HTTPS. Este tipo de cifrado asegura que los datos sensibles de los usuarios, como las credenciales de una cuenta, no serán enviados en texto plano, agregando así una capa extra de protección sin importar si se está comprando desde una red Wi-Fi hogareña o una red pública.
– Comprobar el estado de la cuenta luego de la compra. Luego de terminar una compra, chequear el balance de la cuenta para asegurarse de que todo está bien y que el precio que se pagó por el producto corresponde al precio que estaba publicado.
Infobae
