La pandemia de covid-19 marca la celebración del tradicional Día de Muertos de este año en México, luego de que las autoridades anunciaran que los panteones permanecerían cerrados para evitar contagios.
En varias zonas del país, la gente acostumbra pasar la noche del 1 al 2 de noviembre en los cementerios para lavar las tumbas de sus difuntos y decorarlas con flores. Algo que no ocurrió este año.
En Ciudad de México, las autoridades locales cerraron los 119 cementerios de la capital e implementaron un despliegue de más de 3.000 uniformados para realizar “labores de control de tránsito, así como de prevención y vigilancia” a la entrada de los panteones, para evitar aglomeraciones y contagios por coronavirus.
También se decidió suspender el desfile de Día de Muertos que se realiza desde 2016, inspirado por la película Spectre, de la saga de James Bond.
Lo mismo ocurrió en Oaxaca, uno de los lugares más coloridos para vivir la celebración. Sin embargo, a pesar del cierre de cementerios, la gente salió a las calles para realizar diversas actividades al aire libre en conmemoración de los difuntos.
En el municipio oaxaqueño de Mitla (cuyo nombre en lengua náhuatl significa ‘lugar de los muertos’), el acceso a los panteones estuvo restringido para que las familias pudieran poner flores en las tumbas de sus muertos. Al igual que en el resto del estado, las ofrendas se pusieron principalmente en casas.
En el estado de Michoacán, las autoridades de la capital estatal, Morelia, también cerraron los panteones.
Sin embargo, el poblado de Pátzcuaro y la isla de Janitzio, sí registraron la llegada de más de 60.000 visitantes durante el fin de semana, de acuerdo a las autoridades locales, pese a existir una alerta de semáforo naranja por covid-19.
Las visitas a la isla, que alberga el emblemático panteón que se ha convertido en un atractivo turístico del estado, estuvieron cerradas para visitantes, mientras que los paseos en bote alrededor del lago estuvieron restringidos.
En el estado de Yucatán, el acceso a los panteones también estuvo restringido y se registró poca afluencia de gente.
Durante el fin de semana, el pasado 31 de octubre, el presidente Andrés Manuel López Obrador organizó una ceremonia e inauguró una monumental ofrenda en Palacio Nacional, que fue montada en honor a las víctimas de la pandemia en el país.
El mandatario también decretó tres días de duelo para conmemorar a los difuntos por el coronavirus, por lo cual, la bandera de México permaneció a media asta y sin actos oficiales.
Al 1 de noviembre, la Secretaría de Salud registró un total de 91.895 defunciones y 929.392 casos confirmados por covid-19 en México, desde el inicio del brote.
Fuente: RT