Las farmacéuticas AstraZeneca y Johnson & Johnson anunciaron este 23 de octubre la reanudación de la tercera etapa de pruebas de sus potenciales futuras vacunas contra el covid-19.
Johnson & Johnson señaló en un comunicado que, “después de una evaluación exhaustiva de un evento médico serio experimentado por un participante en el estudio, ninguna causa clara ha sido identificada”. “Hay muchos posibles factores que podrían haber causado el evento. Basándose en la información obtenida hasta la fecha y la aportación de expertos independientes, la compañía no encontró ninguna evidencia de que el candidato a vacuna causara el evento”, señaló.
La empresa estadounidense afirmó que “los ensayos clínicos están diseñados para evaluar la seguridad y la eficacia, basándose en una vista completa de todos los participantes y sus experiencias”. “Los eventos adversos inesperados, incluso las enfermedades, pueden ocurrir en los participantes en el estudio durante cualquier estudio clínico, especialmente los estudios largos; pueden ocurrir en los grupos [que reciben] vacuna y placebo y requieren evaluación”, reiteró.
Por otra parte, AstraZeneca que está desarrollando el fármaco en colaboración con la Universidad Oxford, comunicó que sus ensayos clínicos “se han reanudado en el mundo y los reguladores en EE.UU., el Reino Unido, Brasil, Sudáfrica y Japón confirmaron que era seguro hacerlo”. Pascal Soriot, director ejecutivo de la compañía con sede en Cambridge, dijo que “la reanudación de los ensayos clínicos en el mundo es una buena noticia, ya que nos permite continuar nuestros esfuerzos para desarrollar esta vacuna para ayudar a derrotar esta pandemia terrible”.
“Somos muy optimistas respecto a que AstraZeneca y Johnson & Johnson reanuden sus ensayos los más rápido posible”, declaró, a su vez, Paul Mango, subjefe de personal para políticas del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.
¿Cuándo y por qué se pararon las pruebas?
AstraZeneca frenó por primera vez los ensayos clínicos en julio, después de descubrir en la primera participante una inflamación en la médula espinal conocida como mielitis transversa, que luego se atribuyó a una esclerosis múltiple no diagnosticada, es decir, no relacionada con la vacuna de AstraZeneca. Una segunda pausa en la vacunación se anunció el 6 de septiembre, después de que el incidente se repitiera de nuevo. AstraZeneca afirmó que el diagnóstico de la segunda voluntaria no había sido confirmado, pero una fuente reveló a los medios que el trastorno había sido identificado como mielitis transversa.
Los ensayos de Johnson & Johnson fueron suspendidos la semana pasada, debido a una enfermedad inexplicable que presentó uno de los participantes. “Hemos detenido temporalmente la dosificación adicional en todos nuestros ensayos clínicos candidatos a vacuna covid-19, incluido el ensayo Ensemble de fase 3, debido a una enfermedad inexplicable en un participante del estudio”, señaló la firma.
RT Actualidad