Miami, EFE.- Con una visita a los cubanos y haitianos de Miami, el candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, ha dejado claro este lunes que cualquier comunidad del estratégico estado de Florida es clave para darle la victoria electoral en 29 días o reelegir al presidente Donald Trump.
Mientras Trump prepara su regreso convaleciente a la Casa Blanca, tras tres días de hospitalización debido a que está contagiado del coronavirus, Biden aprovecha los últimos días para conquistar al votante hispano, incluso el cubano, el más reacio a votar por él el próximo 3 de noviembre.
En su primera aparición de campaña en el sur de Florida, que incluye además un encuentro comunitario que se emitirá esta noche desde Miami por NBC, el demócrata ha centrado sus promesas entre los hispanos en los temas de salud, empleos, educación, inmigración y, por supuesto, Cuba.
El demócrata incluso aprovechó para urgir al presidente Trump a hacer obligatorio el uso de mascarilla en el país, donde han muerto más de 200.000 personas debido a la COVID-19 y donde los hispanos han sido afectados de forma desproporcionada.
“Le pediría (a Trump) que haga esto: escuche a los científicos y apoye la obligatoriedad de usar máscaras en todo el país”, dijo Biden, que se mostró complacido de que el mandatario esté “alegre tuiteando”.
Con mascarilla puesta, Biden dijo al electorado cubano que son ellos los mejores “embajadores” para recobrar la democracia en la isla.
El que fuera el vicepresidente de Barack Obama (2009-2017), que durante su Gobierno emprendió el deshielo hacia la isla que Trump se ha encargado de revertir casi por completo, enfatizó que la política del republicano hacia Cuba no ha funcionado.
CUBA PARA CUBANOS Y LEJOS DE PUTÍN
“Necesitamos una nueva política hacia Cuba. El enfoque de esta Administración no está funcionando. Cuba no está más cerca de la libertad y la democracia hoy que hace cuatro años”.
El demócrata criticó además la “importante” presencia de Rusia en la isla caribeña y recalcó su historial de lucha a favor de la democracia y los derechos humanos y en contra de “dictadores de derecha y de izquierda”.
“El presidente Trump no puede promover la democracia y los derechos humanos del pueblo cubano cuando ha abrazado a tantos autócratas en todo el mundo, empezando por Vladimir Putin (el presidente ruso)”, manifestó.
Con estas palabras en un gimnasio de la Pequeña Habana, barrio de exiliados cubanos visitado con frecuencia por Trump en tiempos de campaña, el demócrata busca complacer a los cubano-estadounidenses y hacerse así con los 29 votos que Florida brinda para el Colegio electoral, que es el que elige al presidente.
Por otro lado subrayó que es “inconcebible” que la Administración de Trump esté deportando a cientos de cubanos a una dictadura”.
Aseguró además que hay casi 10.000 cubanos “languideciendo en campamentos” a lo largo de la frontera mexicana en seguimiento de la política “separatista” migratoria de Trump.
Una disputa que se fue a insultos entre una cubana seguidora de Trump y un hombre que se decanta por Biden en las afueras del gimnasio evidenció la reñida contienda que se avecina en Florida, donde hoy terminó la inscripción de votantes, que por ahora suman 14 millones, 5,2 millones de ellos demócratas, 5 millones republicanos y 3,6 millones independientes.
CAMINO A LA CIUDADANÍA PARA HAITIANOS
Los haitianos, que recibieron unas horas antes a Biden con bailes folclóricos en un centro cultural de la Pequeña Haití, también son cruciales para elegir a Biden. Él mismo se los dijo en un evento al aire libre.
“Este es el último día que puede registrarse para votar en Florida. Importa, realmente importa… la propia comunidad haitiana puede determinar el resultado de esta elección”, enfatizó.
El Partido Demócrata calcula que en Florida hay unos 300.000 votantes haitiano-estadounidenses y que unos 83.000 están en riego de ser deportados por el Gobierno Trump, que ha buscado eliminar el Estatus de Protección Temporal (TPS) que los mantiene en el país.
Biden les prometió hoy que “garantizará” este alivio migratorio, pero además que estos beneficiados del TPS tendrán la posibilidad de un camino a la ciudadanía bajo una reforma del sistema migratorio que él piensa impulsar.
Su campaña subrayó a través de un comunicado que de ser elegido habrá “un liderazgo que trata a los haitianos con dignidad” y lamentó que Haití haya sido “denigrado” por el Gobierno de Trump, al recordar que esa nación caribeña junto con otras africanas fueron llamadas por el republicano como “shithole countries” (países de mierda).
BIDEN, ADELANTE EN FLORIDA
Biden aventaja al republicano por un promedio de 8,3 puntos en las encuestas de opinión nacional, según el portal especializado Real Clear Politics, pero en Florida esa distancia es sólo de 2 puntos a favor del exvicepresidente.
Tras el primer debate que sostuvieron ambos el martes pasado, Biden incrementó su ventaja, y ahora los ojos están puestos en el segundo debate, programado para el próximo 15 de octubre en Miami, pero aún una incógnita por la enfermedad de Trump.
El candidato demócrata concentró hoy su campaña en Miami, mientras su esposa, Jill, promovió su elección entre mujeres de Boca Ratón, ciudad 72 kilómetros más al norte.