El Gobierno de EE.UU. anunció este martes sanciones contra cinco “miembros clave del régimen” del presidente venezolano, Nicolás Maduro, por subvertir las elecciones legislativas convocadas para el 6 de diciembre en ese país.
Los sancionados son Bernabé Gutiérrez Parra, Miguel Antonio José Ponente Parra, Guillermo Antonio Luces Osorio, Chaim José Bucaran Paraguan y Williams José Benavides Rondón quienes, según Washington, “lideran parodias de partidos opositores que participarán en la farsa electoral programada para el 6 de diciembre”.
Bernabé Gutiérrez Parra, un disidente del partido opositor Acción Democrática (AD) cercano al chavismo, fue nombrado en junio por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) como líder de esa formación.
Por su lado, Benavides Rondón, diputado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), también fue nombrado en agosto por el TSJ como presidente del partido chavista Tendencias Unificadas Para Alcanzar Movimiento de Acción Revolucionaria Organizada (Tupamaro).
Miguel Ponente fue nombrado por el mismo procedimiento secretario general nacional del partido opositor Primero Justicia, mientras que Chaim Bucaran, del partido Un Nuevo Tiempo, intentó hacerse con el control del movimiento con la ayuda del TSJ y una directiva paralela.
Finalmente, el chavista Guillermo Luces Osorio fue nombrado por el Supremo como integrante de la nueva junta directiva del partido Voluntad Popular (VP), del líder opositor Leopoldo López, asimilada así al oficialismo.
Según el Gobierno estadounidense, con esas decisiones ejecutadas por el TSJ, controlado por el chavismo, el Gobierno de Maduro pretende “corromper las elecciones democráticas en Venezuela”.
Los sancionados, según una nota del Departamento de Estado, son cómplices con “los esfuerzos de Maduro de privar al pueblo de Venezuela del derecho a elegir a sus líderes a través de elecciones libres y justas”.
El pasado día 4, el Gobierno de EE.UU. ya sancionó a la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Indira Alfonzo; al rector principal de ese órgano, José Luis Gutiérrez, así como al procurador general de Venezuela, Reinaldo Muñoz, y a David De Lima, exgobernador del estado de Anzoátegui.
A muchos de los políticos más populares de Venezuela no se les permite postularse a la elección, no hay máquinas de votación confiables, millones de votantes siguen sin figurar en los padrones electorales, hay presos políticos confinados indefinidamente en las cárceles y el que supervisa todo esto es “un Consejo Electoral amañado”, dijo el Departamento de Estado.
EE.UU. ya condenó anteriormente las elecciones legislativas que Venezuela tiene previsto celebrar el 6 de diciembre y a las que no se presentarán 27 partidos opositores por considerar que no existen condiciones posibles para acudir a las urnas.
Su principal crítica reside en el nombramiento de los magistrados del CNE, una labor que corresponde a la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), que actualmente tiene una gran mayoría opositora.
Sin embargo, el TSJ, cuya legitimidad niega la oposición por estar compuesto por personas abiertamente afines al chavismo nombradas en un proceso exprés, designó a los magistrados del CNE al considerar que la AN había hecho “omisión” de sus funciones.
Con esta acción, EE.UU. busca congelar todos los bienes que los sancionados puedan tener en el país, mientras se prohíbe a los estadounidenses hacer transacciones financieras con ellos, lo que en teoría les impide el acceso al sistema financiero internacional, basado en el dólar.
Estados Unidos reconoce como gobernante legítimo de Venezuela al líder opositor Juan Guaidó, aceptado como presidente interino por más de medio centenar de países.
Fuente: EFE