Miami, EFE.- Un informe del Comité de Inteligencia del Senado de EE.UU. indica que Paul Manafort, que fue jefe de campaña del hoy presidente Donald Trump en 2016, viajó a Cuba en 2017 para reunirse con “un hijo de Castro”, sin especificar si Fidel o Raúl, según el diario Miami Herald.
De la visita de Manafort a Cuba se informó en su día pero ahora en un informe sobre la interferencia de Rusia en la campaña presidencial de 2016 surgió el tema la entrevista con un miembro de la familia gobernante en Cuba.
Según el diario, fue el propio Manafort el que le confirmó a los investigadores del FBI que la reunión con “el hijo de Castro” fue arreglada por Brad Zackson, que trabajó como “broker exclusivo” de las propiedades inmobiliarias del padre de Trump, Fred Trump, ya fallecido.
Según los informes a los que tuvo acceso el Herald, la visita a Cuba habría tenido lugar en los primeros días de enero de 2017, justo después de que Trump asumiera la Presidencia.
Manafort dejó la campaña de Trump en agosto de 2016 al estallar un escándalo por su trabajo como cabildero para un partido político pro-ruso en Ucracia.
Como resultado de la investigación del consejero especial Robert Mueller por los lazos de la campaña de Trump con Rusia, fue condenado a siete años de cárcel por fraude fiscal y bancario y está cumpliendo su condena en arresto domiciliario.
El diario miamense indica que el informe no especifica si efectivamente se concretó la reunión “con el hijo de Castro” ni cual fue la intención del viaje.
La información provocó inmediatamente la reacción del Partido Demócrata.
El asesor de la campaña de Joseph Biden, candidato demócrata a la Presidencia, Cristóbal Alex dijo que “esta noticia es alarmante pero no sorprendente”.
“A Donald Trump y sus amigos les encanta pretender que tienen mano dura cuando se trata de Cuba y otras dictaduras, mientras tanto continúan comportándose de una manera corrupta, hipócrita, y más que todo una disposición de poner su propio interés antes de los intereses nacionales de los Estados Unidos”.
El hecho de que Paul Manafort visitara Cuba en el 2017 “enfatiza que a Trump y a sus amigos cercanos sólo les importan ellos mismos”.
“No nos dejemos engañar, la administración de Trump no se preocupa por responsabilizar los regímenes venezolanos o cubanos, y no están intentando mejorar la situación para los cubanos y venezolanos- sólo quieren aprovecharse de la situación para su ganancia personal y política”, dijo Alex.
El representante demócrata en el Congreso de Florida Javier Fernández dijo: “como cubanoamericano, me ofende, pero no me sorprende, la hipocresía de la administración Trump”.
“Es un insulto que el director de campaña de Trump viajara para reunirse con el hijo de Castro, promocionando su acceso a la Casa Blanca y estuviera ganando dinero con este acceso”, señaló.