Por EFE.- España comienza la cuenta atrás para el inicio del curso escolar, que arrancará a finales de la semana que viene, pero las familias siguen preguntándose cuáles son las medidas definitivas de cada una de las regiones y el Gobierno español para que en los centros se garantice una vuelta segura para sus hijos, en unas circunstancias marcadas por el alto indice de contagios por COVID-19.
Los casos de coronavirus en España superan los 386.000 desde el inicio de la pandemia, mientras que la cifra de fallecidos roza los 29.000, con más de mil brotes activos que en la actualidad afectan a un porcentaje muy elevado de población joven.
Las competencias educativas en España las tienen las comunidades autónomas, y cada una de ellas van anunciando sus protocolos, pero cada vez cobra más fuerza la petición de unos mínimos planes comunes para hacer frente al coronavirus en las aulas, especialmente en un momento en que la expansión de los contagios hace preguntarse si se mantendrán las fechas previstas de inicio de curso.
El Ministerio español de Educación aclaró este lunes que no se está valorando “ninguna modificación” respecto a que el curso arranque en las fechas previstas de septiembre, distintas por estar fijadas por regiones, pero sumando siempre un mínimo de 175 días lectivos.
A falta de lo que se concrete en la reunión del próximo jueves entre el Ejecutivo presidido por el socialista Pedro Sánchez y los gobiernos regionales, lo acordado es que el curso comience “en las fechas habituales del mes de septiembre y con la presencialidad como principio general”.
INQUIETUD EN LAS FAMILIAS
Pero las familias siguen con inquietud cada día que pasa e incluso algunas se plantean si llevar o no a sus hijos al colegio.
“Las familias queremos que los colegios se abran, haya una incorporación presencial a ser posible y que se garanticen las medidas sanitarias para nuestros hijos y sus educadores”, dijo a Efe el presidente de la Confederación Católica de Padres de Alumnos (Concapa), Pedro Caballero.
“A día de hoy no sabemos si se puede garantizar todo ello o no, no sabemos si están preparados los centros, si habrá material para llevar las medidas a cabo, no sabemos si hay más profesorado, si habrá pruebas PCR a los profesores y alumnado, no sabemos nada”, recalcó.
Caballero aseguró que reciben muchas llamadas de padres “alarmados” por la situación que se puede vivir en sus casas en caso de contagios y, por eso, desde la asociación que dirige se están estudiando las medidas jurídicas que pueden producirse si una familia no lleva a clase a sus hijos.
También desde la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (Ceapa) se reivindica el derecho a la educación presencial con las máximas garantías higiénico-sanitarias.
Otros padres van más allá y a través de plataformas como Change.org están recogiendo firmas para defender que sea voluntaria la vuelta a clase mientras no haya medidas seguras.
“Si vuelve al colegio o estudia en casa lo decidimos los padres” o “Un año escolar se recupera, la vida no. No mandes a tus hijos a clase” son algunos de los eslóganes por los que entre 8.000 y 15.000 padres de familia ya han firmado.
HUELGAS EN MADRID Y MEDIDAS EXCEPCIONALES EN CATALUÑA
Mientras, los gobiernos autonómicos van dresgranando día a día sus planes para el inicio del curso.
Madrid, primera región en arrancar junto con Navarra el día 4 de septiembre para escuelas infantiles, anunciará mañana martes sus nuevos planes, mientras que Cataluña ya ha especificado este lunes que las mascarillas serán obligatorias para todos los alumnos de más de 12 años, y para los mayores de 6 años en aquellos territorios donde sea más elevado el riesgo de contagio, mientras que la ratio de alumnos en las clases de Primaria será de menos de 20 alumnos.
Peo antes de conocerse los planes para los colegios madrileños, los principales sindicatos ya han convocado varios paros para los días del inicio de curso de cada etapa educativa y una conjunta el 10 de septiembre.
La Marea Verde de Madrid, movimiento que defiende la educación pública, ha convocado también una movilización el 5 de septiembre para exigir una vuelta “segura” a las aulas “cien por cien presencial”.