Miami, EFE.- El alcalde de Miami, Francis Suárez, pidió este martes “suspender temporalmente” la venta de fertilizantes para proteger la bahía de la ciudad, un día después de que la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC) concluyera que la muerte masiva de peces se debe a un bajo nivel de oxígeno disuelto en el agua.
“Estoy pidiéndole ayuda al estado, al gobernador Ron DeSantis, y también le estoy pidiendo a las tiendas que no vendan los químicos que fertilizan las hierbas pero pueden matar a los peces en nuestra bahía”, dijo Suárez en una conferencia de prensa.
Junto a miembros de organizaciones ecologistas en Morningside Park, el lugar de la Bahía Vizcaína (Biscayne Bay) donde esta semana se ha encontrado la mayor cantidad de los miles de peces que han muerto, el alcalde puntualizó que el ayuntamiento “actuó inmediatamente para proveer una bomba para oxigenar el agua”.
“Estamos en un momento crítico y debemos examinar cómo nos comportamos y qué podemos hacer para encontrar una solución porque la bahía no solo es para disfrutarla, sino que es parte de nuestra economía y es algo que nos sostiene”, afirmó Suárez.
En su cuenta de Twitter, el alcalde dijo que envió una carta “a la Cámara de Comercio del Gran Miami” pidiendo suspender temporalmente la venta de fertilizantes.
Por su parte, el comisionado (concejal) Ken Russell hizo “una llamada de alarma para todo el mundo”.
“Los peces se mueren porque no hay oxígeno, el alga azul mata a los peces y los químicos también”, añadió Rusell.
OPINIÓN CIENTÍFICA
La máxima autoridad medioambiental de Florida, FWC, determinó que la muerte masiva de peces en la bahía de Miami es el resultado de un bajo nivel de oxígeno disuelto en el agua.
“Las condiciones de bajo oxígeno disuelto pueden ser causadas por una serie de factores (…) como las altas temperaturas estacionales del agua”, concluyó el informe de FWC
También, los científicos de FWC relacionan entre los factores “la escorrentía y la renovación de las aguas del fondo pobres en oxígeno después de lluvias recientes y fuertes”, comunes de los meses de verano y la proliferación de la macroalga Sargassum que puede consumir oxígeno a medida que se descompone.
La organización ecologista Miami Waterkeeper, que ha estado liderando el envío de muestras de agua y peces muertos a FWC y que estuvo presente en la rueda de prensa, advirtió hoy en un comunicado sobre la proliferación de sargazos.
“Aunque muchos informan que la muerte de los peces es el resultado del calor, esto NO es típico de la Bahía Vizcaína”, recalcó la ONG.
“Hasta hace unos años, los niveles bajos de oxígeno disuelto en verano no eran comunes. El aumento de sargazo empeora la situación. Es probable que el evento se deba a la prolongada extinción de pastos marinos que se producen en el norte de la bahía”, expuso Miami Waterkeeper.
Según el borrador de un informe de un grupo de trabajo creado a principios de 2019 para solucionar los problemas de contaminación en el área, la bahía ha perdido más de 32 kilómetros cuadrados (20 millas cuadradas) de pastos marinos en las últimas tres décadas.
Gran parte de la pérdida se atribuye al empeoramiento de la contaminación por aguas pluviales sucias, escorrentía de fertilizantes y tanques sépticos con fugas, apunta el borrador citado por WLRN, la web de la radio y televisión públicas del sur de Florida.