Nada pudieron los muros y barrotes de la prisión de máxima seguridad de Welikada, en Sri Lanka, para impedir el escape de un gato ‘narcotraficante’, a pesar de que se encontraba bajo estricta vigilancia, informa AFP.
El animal había sido detenido cuando intentaba introducir al penal casi dos gramos de heroína, dos tarjetas SIM para teléfonos celulares y una tarjeta de memoria, todo ello en una pequeña bolsa de plástico que llevaba atada al cuello.
Las autoridades carcelarias informaron que en las últimas semanas han registrado un aumento en el número de intentos de arrojarle a los reclusos ese tipo de paquetes por encima de los muros del recinto.
El felino había sido ‘apresado’ el 1 de agosto y apenas un día después logró darse a la fuga, pero la noticia solo salió a la luz en medios locales el lunes 3 de agosto. Desde la prisión se negaron a comentar el incidente.
Fuente: RT