“Aunque muchas mujeres y muchos hombres aseguran que un pene grande brinda una mejor estimulación sexual, otras y otros simplemente le restan importancia afirmando que, a pesar de tener pareja con uno de tamaño pequeño, ellas y ellos han logrado disfrutar de encuentros sexuales satisfactorios y placenteros”, destaca el andrólogo José Benítez Molina, director médico de Boston Medical Group, un experto en sexualidad masculina.
“La preocupación por el tamaño del pene, cuando no obsesión, puede llegar a constituir un problema durante el acto sexual o las relaciones de pareja. Raras veces ese tamaño está fundamentado en una realidad, ya que, en la mayoría de los casos, solo es un problema emocional o de habilidades sexuales, casi nunca de dimensiones físicas”.
“Numerosos estudios certifican que el tamaño aproximado del pene en erección, medido desde el hueso púbico hasta el meato, se sitúa en torno a los 13 centímetros y obtiene un grosor cercano a los 11 centímetros en dicho estado. También se deduce que poco más del 5% de los varones tendrían un “micropene”, cifra similar a los que superan la medida estándar con creces”.
“A la pregunta de si el tamaño del pene importa la respuesta es NO -dice-. Los varones piensan en los 13 o 15 centímetros de largo impuestos mediáticamente para el tamaño normal, cuando lo habitual es que mida entre 7 y 16, al menos en España. Además, se debe poner el foco en el grosor, característica del pene en erección que produce una mayor satisfacción sexual al ser el protagonista del roce genital de la pareja”.
El tamaño del pene no da la felicidad… a una inmensa mayoría
Según la experiencia de médicos como José Benítez, más allá de dimensiones o de cualquier otro detalle físico, el pene debe cumplir una doble función: erección con rigidez y firmeza suficientes para conseguir la eyaculación en el interior de la vagina, cuando una mujer y un hombre desean un bebé, o dar y recibir placer sexual.
“De nada sirve tener un miembro de gran tamaño en estado flácido, incapaz de lograr sus objetivos. Nuestra vida sexual depende de muchas cosas que poco tienen que ver con el tamaño del pene. Las parejas deben hablar y acordar lo que les gusta experimentar. La clave de la satisfacción sexual está en una comunicación abierta y transparente entre iguales”, subraya.
Para el doctor Benítez, en realidad, la preocupación del varón debería estar centrada en mantener una buena salud psíquica y física con el fin, entre otros, de evitar la tan temida disfunción eréctil; coyuntura fisiológica que llamará a la puerta de los hombres más temprano que tarde… “Y por eso siempre nos encontrarán a su lado, para ayudarles a superar las dificultades”.
¿Aumentar el tamaño con una prótesis?
Una prótesis de pene no es más que un dispositivo, armado con dos cilindros, que se coloca, mediante cirugía, en el lugar que ocupan los cuerpos cavernosos del pene, las estructuras naturales encargadas de mantener la erección con el acúmulo del caudal sanguíneo.
“Hay pacientes que relacionan el aumento del tamaño del pene con una prótesis y debemos aclarar que, en nuestra opinión, su indicación es el último escalón a subir cuando han fallado el resto de tratamientos y solo en casos muy, muy extremos. Es más, en nuestras clínicas no practicamos cirugías de prótesis de pene“, afirma el doctor José Benítez.
Esta intervención quirúrgica precisa de anestesia, hospitalización y alrededor de una semana de recuperación. Además, puede ocasionar efectos secundarios y complicaciones (leves: hematomas en el pene, escroto, perineo; abdomen; y graves: infecciones y la erosión de los cuerpos cavernosos o de la uretra).
“Esta técnica invasiva se ha quedado obsoleta. Existen más y mejores tratamientos innovadores, como los clásicos inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 (viagra, cialis, levitra y spedra), la farmacoterapia intracavernosa y las ondas de choque“, divulga.
“También se están desarrollando investigaciones en el campo de las células madre (trasplantes celulares autólogos) y del Plasma Rico en Plaquetas (PRP) o factores de crecimiento”, concluye.
Fuente: EFE