Redacción Digital
Santo Domingo
El candidato que resulte electo en las elecciones presidenciales de este domingo deberá enfrentar grandes retos económicos, producto de la gran crisis que enfrenta el país actualmente por la pandemia del COVID-19.
El gabinete presidencial, que asumirá el próximo 16 de agosto heredará un país económicamente devastado, con un presupuesto agotado y una débil reserva internacional del Banco Central.
Su principal gran reto será recuperar la economía, el turismo, y todos los sectores productivos.
Además, las proyecciones funestas de un repunte en el precio de barril de petróleo en los mercados internacionales, en momentos que la prima del dólar ronda el histórico 60 por uno.
La pandemia ha obligado al Gobierno de Danilo Medina a contratar nuevas deudas, que deberán asumir el jefe de estado entrante.
En ese sentido, el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó 650 millones de dólares como asistencia financiera del país, para atender las necesidades indispensables de balanza de pagos derivadas por la situación.
100 mil millones para hacer frente a la crisis
De los 150 millones de pesos aprobados por el Congreso Nacional al presupuesto complementario para atender el gasto público que ocasiona la crisis, el presidente Medina informó durante su última alocución al país que dejarán a las autoridades que se juramentarán el 16 de agosto, más de 100 mil millones para la causa.
De acuerdo con Héctor Valdez Albizu, gobernador del Banco Central, a pesar de la gran crisis que ha generado el coronavirus, los fundamentos de la economía se mantienen fuertes y jugarán un rol de primera línea para retomar el camino del crecimiento con estabilidad.
Explicó que “las medidas de estímulo fiscal que se están aplicando permitirán que el país pueda continuar su trayectoria de crecimiento sostenido y baja inflación, preservando la estabilidad macroeconómica”.
Propuestas de los candidatos para enfrentar la crisis
Luis Abinader
Para enfrentar los efectos de la crisis económica derivada por la pandemia, el denominado “candidato del cambio”, Luis Abinader, divide su propuesta para la economía en dos, medidas especiales por la coyuntura en momentos de crisis y lo referente al relanzamiento de la economía.
“En lo que tiene que ver con la crisis nosotros planteamos un salario mínimo universal de 10 mil pesos, tanto para los trabajadores puedan subsistir durante todo este proceso además de mantenerlo hasta que se integren a sus labores”.
El candidato perremeísta promete trabajar un programa de relanzamiento a través de incentivos fiscales especialmente en el sector construcción con viviendas de bajo costo, construcción de acueductos y otras áreas que ayuden a motorizar y dinamizar la economía.
Leonel Fernández
De ganar las elecciones, el tres veces presidente de la República y aspirante al mismo cargo por la Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, acudiría a fondos internacionales para amortiguar los empréstitos en el servicio de la deuda, que entiende, “están demasiados elevados”.
Fernández opina que para cubrir el déficit es necesario gestionar fondos de organismos internacionales con menores condiciones, “ya que como resultado del covid-19, desde el punto de vista económico, se proyecta que los ingresos del Estado caerán en un 4% en comparación con los ingresos de 2019 y en 15% con relación al presupuesto del 2020”.
El líder político promete dinamizar la economía, a través de una política expansiva del gasto público, basada en la construcción y reparación de viviendas de bajo costo, de acueductos, plantas de tratamiento de aguas residuales, drenaje pluvial y canales de riego.
Gonzalo Castillo
El candidato oficialista, Gonzalo Castillo, sin dar detalles de cómo lo hará, ha expuesto que en un posible gobierno encabezado por él aplicaría un plan de ejecución de obras, y “reactivaría la economía, pero para estabilizarla y que vuelva el crecimiento debemos crear las condiciones para que las actividades productivas puedan recuperarse lo antes posible”.
Promete también que adoptará las medidas fiscales y monetarias necesarias para mantener la estabilidad macroeconómica, con un tipo de cambio estable y una tasa de inflación baja.
Con respecto al turismo, el sector económico más importante del país y el que más fuerte ha sido golpeado por el COVID, el aspirante por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), asegura que tomaría todas las medidas necesarias para que recobre su esplendor, las sendas del crecimiento y expansión.
También, “ayudaría con inversiones públicas al campo, la industria, las MIPYMES, el comercio”.
Castillo dejaría vigente los programas de ayuda establecidos por el gobierno actual hasta que la crisis esté superada.