Venezuela anunció este sábado que radicalizará su cuarentena en nueve estados y Caracas a partir del próximo lunes y que cerrará de nuevo su economía no esencial para hacer frente a la expansión del nuevo coronavirus, luego de haber flexibilizado las restricciones a 25 sectores durante una semana.
“Todos a la casa, quédate en casa es la consigna de esta semana”, dijo a través de la televisión pública VTV la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez. “Nosotros no vamos a esperar una situación de desbordamiento” por la COVID-19, añadió.
La funcionaria indicó que las medidas de cuarentena radical incluyen el cierre del Metro de Caracas y la suspensión de todo el transporte público, así como la prohibición de circulación en las principales carreteras, para lo cual se establecerán “barreras de contención”.
Pero los trabajadores de los sectores esenciales de la economía, como alimentos, salud y servicios públicos, tendrán movilidad garantizada, dijo Rodríguez.
Además, el Gobierno de Nicolás Maduro hará una “revisión” a los permisos de operación que se habían otorgado a varias actividades deportivas, como el fútbol y los gimnasios, estos últimos en un parón de al menos una semana desde el próximo lunes.
Estas medidas especiales de confinamiento tendrán vigor en los estados La Guaira, Miranda, Aragua, Lara, Zulia, Táchira, Bolívar, Trujillo y Apure, así como en la capital Caracas, y están diseñadas, dijo Rodríguez, para frenar la propagación de la COVID-19 en el país.
Esta enfermedad ya se cobró en Venezuela la vida de 33 personas y contagió a 3.789, si se atienden a los datos suministrados este sábado.
Rodríguez también dijo que más del 77 % de los casos que registra Venezuela son “importados” o de contacto con viajeros internacionales, la mayoría de ellos de Colombia y Brasil.
En tanto que el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, señaló que la Fuerza Armada será muy rigurosa y apoyará las medidas restrictivas impuestas por el Gobierno.
Asimismo, denunció que las autoridades colombianas y grupos paramilitares están “alentando” a los venezolanos, muchos de ellos contagiados del virus del SARS-COV-2, a regresar a Venezuela a través de pasos ilegales conocidos como “trochas”.
El Gobierno venezolano asegura que la falta de control y organización en estos retornos, que ya suman más de 60.000, han elevado las cifras de contagiados por el nuevo coronavirus en el país.