La mayor parte de las personas utiliza la cera depilatoria para eliminar el vello de nuestro cuerpo pero, ¿sabemos qué cera utilizar?
Hay muchos tipos de cera y cada uno debe elegir la que más le guste o le sea más cómoda. Una de las mejores formas para averiguar cuál sería el mejor método para ti, seria el de acudir a un centro de estética, los profesionales sabrán que aconsejarte y qué tipo es el que más te convenga por tu tipo de vello, cantidad…
¿Cuáles son los tipos de cera para depilar?
Los tipos de cera que podemos encontrar se dividen en 3 grupos:
Tipo 1: cera tibia
Es una cera que se ha puesto muy de moda, alcanza una temperatura ligeramente superior a la de nuestro cuerpo, la suficiente como para abrir el poro sin alterar la circulación ni dañar los capilares, por eso está recomendada para personas con varices.
Es aconsejable para la depilación de medias piernas, piernas enteras y brazos.
Esta cera se obtiene a través de la mezcla de distintas resinas, y es muy sencilla de usar, no hace falta acudir a ningún centro de estética para realizarla.
Los métodos que podemos utilizar, son con cera roll on o bien con espátula.
El más rápido, limpio y aconsejable es el roll-on con el que tan sólo has de introducir un cartucho de cera en un aparato especial que la calienta, al calentarla pasar el aparato por la zona y con ayuda de una banda retirar el producto.
Tipo 2: cera caliente
Esta cera se suele utilizar más en los centros de estética ya que suele ser la más eficaz. Al estar tan caliente hace que el poro se abra y el pelo salga mejor.
Hay cera caliente en muchos formatos y necesitan de un calentador de cera para poder disolverse. Después, con una espátula se coge le producto y se extiende por la zona, se espera a que se enfríe y se arranca de un tirón.
Es ideal para cabello grueso y rebelde, como es el caso de las axilas y las ingles.
No es aconsejable su uso en personas con mala circulación, varices o problemas en la piel.
Tipo 3: cera fría
Este método lo utiliza mucha de la gente que se depila en su casa.
Se realiza a través de bandas para depilar de papel que llevan la cera incorporada y se aplican directamente en la zona que se quiere depilar.
Está muy recomendado para las personas que tienen problemas circulatorios.
La mayor desventaja de este método es que hace que la depilación sea mucho más dolorosa y que el vello crezca mucho más rápido que con las dos anteriores.
Consejos extra para la depilación
Si cuando os depiláis queda la zona muy inflamada os aconsejamos que una hora antes os toméis una aspirina, así se alivia el dolor y evita la inflamación.
También existen muchas cremas que duermen la zona y no se siente el dolor.
Antes de la depilación recordad que la piel ha de estar seca y limpia además es muy aconsejable exfoliarse la piel de vez en cuando y más antes de la depilación, de esta manera obtendréis unos mejores resultados.
Usar un guante de crin en la ducha también os evitara los pelos enquistados y todos será más fácil para la siguiente depilación.
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