Madrid, 1 jun (EFE).- La plantilla del Real Madrid volvió a trabajar en equipo en su ciudad deportiva 81 días después, tras el estado de alarma por la pandemia del coronavirus, que provocó que ya no se ejercitasen el 12 de marzo cuando dio positivo el jugador de baloncesto Trey Thompkins y un regreso progresivo en sesiones individuales primero y en pequeños grupos posteriormente.
Ese encuentro contra el Eibar, correspondiente a la vigésima octava jornada de LaLiga Santander, lo comenzó a preparar el 11 de marzo el Real Madrid. Fue el último día que se pudo entrenar toda la plantilla junta, con medidas ya adoptadas por la expansión del coronavirus, un día antes de que todos quedasen en cuarentena en sus domicilios por el positivo de un jugador de baloncesto que entrenaba a diario en la ciudad deportiva madridista.
La cara cambió en Valdebebas en una mañana en la que los futbolistas del primer equipo volvieron a trabajar juntos. La iniciaron con un intenso trabajo físico, con ejercicios con balón individuales y posteriormente en grupo, para acabar disputando al fin un partido a todo campo de doce contra doce.
Es la forma en la que los jugadores irán recuperando tres meses después el ritmo de partido y las medidas del terreno de juego para la vuelta a la competición. No disputó el partido el delantero Mariano Díaz, con el grupo en todo el entrenamiento menos la parte final. Y se ejercitó en solitario Nacho Fernández por unas molestias que ya no impedirán su regreso el martes a la dinámica de grupo, según informan desde el club a Efe. Mientras, sigue de baja por lesión Luka Jovic que continua con su proceso de recuperación.
