Madrid, EFE.- Los pacientes en fases graves de los coronavirus Covid-19, SARS y MERS pueden experimentar problemas mentales durante su hospitalización y “potencialmente” después de la recuperación, según una investigación que revisa estudios ya existentes sobre estas enfermedades.
“La mayoría de las personas con Covid-19 no desarrollarán ningún problema de salud mental, incluso entre los casos más graves que requieran hospitalización”, señala en un comunicado Jonathan Rogers del Instituto de Salud Mental UCL y uno de los autores del estudio que publica The Lancet Phychiatry.
Aún así, “uno de cada cuatro hospitalizados por Covid-19 pueden experimentar delirio durante la enfermedad”, un estado mental caracterizado por cambios en el nivel de conciencia, problemas de comportamiento y, en ocasiones alucinaciones, indica la nota.
El estudio es una revisión de investigaciones previas sobre personas que tuvieron que ser hospitalizadas por los coronavirus SARS de 2002; MERS de 2014 y la actual Covid-19.
Los autores del nuevo documento analizaron 65 estudios que habían pasado la revisión por otros expertos y siete textos prepublicados y a la espera de revisión, con datos de más de 3.500 personas que habían sufrido una de las tres enfermedades.
Durante su estancia en el hospital, “una minoría significativa de personas” con algún tipo de coronavirus experimentaron síntomas de delirio como confusión, agitación y alteración de la conciencia.
Casi el 28% de las personas hospitalizadas por el SARS y el MERS experimentaron confusión, y las primeras evidencias de la pandemia en curso sugieren que el delirio puede darse también en los pacientes de COVID-19.
Sobre los posibles riesgos a largo plazo de sufrir estrés postraumático, fatiga crónica, depresión o ansiedad, una vez que se ha superado la Covid-19, los expertos indican que aún no se sabe, porque es una enfermedad reciente.
Por eso, el equipo se centró en estudios previos sobre el SARS y el MERS. Los científicos advirtieron de que lo que se sabe de brotes previos de otros coronavirus puede ser útil, pero no predecir con precisión la prevalencia de complicaciones psiquiátricas en la actual pandemia.
El análisis de estudios sobre SARS y MERS “sugiere” que “pueden haber un riesgo” de sufrir depresión, ansiedad, fatiga e incluso síndrome de estrés postraumático en los meses y años siguientes a recibir el alta.
Casi una de cada tres personas hospitalizadas por SARS o MERS desarrollaron trastorno de estrés postraumático, con un tiempo de seguimiento medio de casi tres años, especialmente si tenían continuos problemas de salud física.
Los autores dicen que la comunidad médica debería ser consciente de la posibilidad de que se produzcan estos problemas tras la actual pandemia.
Hay varias razones por las que las infecciones graves por coronavirus pueden tener consecuencias psiquiátricas, entre ellas los posibles efectos directos de la infección (incluso en el sistema nervioso central), la respuesta inmunológica y las intervenciones médicas.
Otras razones se relacionan con el impacto social más amplio, incluido el aislamiento social, el impacto psicológico de una nueva enfermedad grave y potencialmente mortal, la preocupación por infectar a otros y el estigma.
Los autores reconocen algunas limitaciones del análisis, como son el uso de algunos estudios que aún no han sido revisados por otros expertos, el incluir solo textos en inglés o la pequeña muestra en algunas investigaciones.
Aunque, la epidemia de Covid-19 ha afectado a una gran proporción de la población mundial, se sabe relativamente poco sobre su potenciales efectos en la salud mental, señala la nota.
Así, Edward Chesney del King’s College London y coautor del análisis señaló que hacen falta más estudios para saber cómo prevenir los problemas de salud mental a largo plazo, investigar qué factores pueden contribuir su aparición y desarrollar intervenciones para prevenirlos y tratarlos.