La Universidad Johns Hopkins en Baltimore, Maryland, cuyos investigadores han estado a la vanguardia en la respuesta mundial frente al nuevo coronavirus, tiene previsto reducir sueldos así como despedir y poner en licencia sin salarios a empleados debido a sus pérdidas millonarias derivadas de la pandemia, anunció su rector, Ronald Daniels.
La universidad privada estadounidense ha desempeñado un papel prominente a nivel global en el seguimiento y la elaboración de modelos sobre la propagación del COVID-19. Sin embargo, dijo que los recortes no repercutirán negativamente en su compilación de datos ni en las investigaciones sobre el virus.
Daniels escribió en una carta publicada el martes en internet que la universidad privada de investigación ha proyectado que tendrá pérdidas por más de 100 millones de dólares para finales de junio y de hasta 375 millones en el actual año fiscal.
Antes de la pandemia, la universidad había proyectado un margen positivo de 72 millones de dólares para este año fiscal sobre un presupuesto general de 6.500 millones de dólares.
“Desde que decidimos poner fin a nuestra instrucción presencial en el campus para estudiantes de licenciatura, de posgrado y profesionales que estudian en el plantel, suspender la mayor parte del financiamiento a nuestro programa de investigación en laboratorios, y parar los procedimientos médicos optativos, la universidad ha sufrido una contracción dramática y sin precedentes”, escribió Daniels.
“Más de 1.200 empleados han quedado inactivos porque no pueden cumplir sus funciones. Muchos más están trabajando fuera de las instalaciones pero a niveles de productividad significativamente reducidos”, agregó.
Daniels dijo que las licencias sin paga y los despidos en partes de la universidad serán “consecuencia inevitable de las pérdidas”. La universidad también congeló las contrataciones de personal para el año fiscal que comienza en julio y restringió las contrataciones para puestos académicos.
Johns Hopkins no es la única institución de enseñanza superior que enfrenta dificultades financieras.
Otras universidades en Estados Unidos están pasando apuros para cubrir enormes huecos presupuestarios debido a las pérdidas financieras que les ha causado el virus y que podrían rebasar los 100 millones de dólares en algunas instituciones.
Fuente: VOA