El vicepresidente y líder del equipo especial contra el coronavirus, Mike Pence, anunció este domingo que un hospital de Michigan usará hidroxicloroquina en una prueba con 3,000 pacientes con COVID-19. Los resultados serán empleados en un estudio formal, aseguró Pence.
Durante la última rueda de prensa diaria de esta semana, el vicepresidente dijo también estar “más que preparados” para poner la hidroxicloroquina a disposición de los consultorios médicos y las farmacias del área de Detroit que “lo consideren apropiado”.
El suministro del medicamento no se reducirá por tanto al hospital Henry Ford, de Detroit, en el que se realizará el estudio. De hecho, el contralmirante John Polowczyk, del grupo de trabajo de logística, añadió que el gobierno está trabajando para distribuir millones de dosis de hidroxicloroquina en áreas con un número creciente de casos de coronavirus.
A pesar de la falta de evidencia científica, Donal Trump lleva semanas elogiando en público las supuestas cualidades milagrosas de la hidroxicloroquina para prevenir o tratar el coronavirus. Este medicamento lleva décadas empleándose para tratar la malaria.
El presidente no dejó este domingo al doctor Anthony Fauci, su máximo experto en enfermedades infecciosas, responder sobre qué opinaba sobre el uso de este medicamento en pacientes con COVID-19. Trump alegó que ya había respondido a esa pregunta “unas 15 veces”.
Un día antes, el doctor Fauci -también director del Instituto de Alergias y Enfermedades Infecciosas- no se atrevió a hacer ningún comentario sobre el tema bajo el argumento de que no había “información definitiva”. Actualmente, ninguna autoridad sanitaria nacional o internacional ha aprobado tratamiento o medicación para el nuevo brote.