EFE, París.
El príncipe Alberto II de Mónaco, que dio positivo por la COVID-19 la semana pasada, sigue en cuarentena pero su estado de salud no es preocupante, indicó este jueves su gabinete.
El jefe de Estado monegasco, miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), está en las dependencias privadas del Palacio y recibe cada día la visita de su médico.
“A pesar de este aislamiento forzoso, sigue trabajando desde su despacho y está en contacto permanente con los miembros de su gabinete, con su gobierno y sus colaboradores más estrechos”, apuntó el comunicado.
Alberto II, de 62 años, está controlado por especialistas del centro hospitalario Princesa Gracia, “que no tienen ninguna preocupación sobre la evolución de su estado de salud”.
El Palacio monegasco informó el pasado 19 de marzo de que el príncipe soberano había dado positivo por coronavirus. Fue el primer jefe de Estado en verse afectado y, en total, según las últimas cifras, en Mónaco hay ya 31 casos confirmados, incluido el suyo.
El Gobierno monegasco impuso el pasado domingo hasta nueva orden un toque de queda nocturno con excepciones para el personal sanitario, las fuerzas de seguridad o todo aquel que justifique una razón imperiosa, como atender a una persona dependiente.
Esa medida se suma a las puestas en marcha desde el martes de la semana pasada para frenar el avance del coronavirus, que ya limitaban los desplazamientos durante el día, salvo por motivos laborales, sanitarios, búsqueda de alimentos y, con excepciones, familiares y deportivos.