Washington, EFE.- Los abogados del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cerraron este martes su sesión final de argumentos en el Senado con un llamado a acabar “aquí y ahora” el juicio político en su contra por las presiones a Ucrania para que investigara a uno de sus rivales políticos, el exvicepresidente Joe Biden.
“Es hora de que esto acabe aquí y ahora”, subrayó Pat Cipollone, líder del equipo de defensa del presidente Trump en su intervención en el Senado.
Cipollone ha criticado de manera reiterada el peligroso “juego político” puesto en práctica por los demócratas para sacar al mandatario del cargo.
Previamente, otro de los abogados del mandatario, Jay Sekulow, insistió en que los cargos contra Trump son demasiado endebles para llevar a cabo un proceso de destitución presidencial con base en una disputa por diferencias políticas.
“El umbral para el juicio político no puede ser tan bajo”, afirmó Sekulow.
Brevedad de la defensa
Con la intervención de este martes, de nuevo marcada por la brevedad, la defensa de Trump puso fin a sus argumentos iniciales.
El sucinto alegato de la defensa contrasta con las prolongadas sesiones de los fiscales acusadores demócratas, encabezadas por el legislador Adam Schiff, quienes expusieron durante largas jornadas que la evidencia era “abrumadora” para destituir a Trump por los cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
Este miércoles y jueves será el momento en el que el centenar de senadores presentarán sus preguntas por escrito para ser respondidas tanto por los fiscales demócratas como por la defensa.
De este modo, el día clave pasaría a ser el viernes, cuando se sometería a debate, y luego a votación, la propuesta de contar con nuevas evidencias y testigos, algo considerado una necesidad y deseado por los demócratas, pero a lo que se oponen los abogados de Trump y sus aliados republicanos.
Unidad Republicana
Los republicanos cuentan con mayoría en el Senado de 53 votos frente a 47, por lo que los demócratas necesitarían el respaldo de cuatro senadores republicanos para rechazar la iniciativa de un juicio rápido planteado por el líder de la mayoría republicana, el senador Mitch McConnell, y conseguir prolongar así el proceso.
La presión se centra en un grupo de senadores republicanos moderados, entre los que se encuentran Mitt Romney (Utah), Susan Collins (Maine), Lamar Alexander (Tennessee) y Lisa Murkowski (Alaska), quienes podrían votar con los demócratas y así abrir la puerta a continuar el procedimiento con la comparecencia de testigos.
Por ahora, sin embargo, los republicanos han votado en bloque en contra de las diversas enmiendas presentadas por los demócratas y estos cuatro senadores han evitado pronunciarse sobre el que podría ser su voto sobre la convocatoria de testigos, por lo que se mantiene la incertidumbre.
Nuevos testigos- Bolton
La presentación de argumentos de la defensa se vio sacudida esta semana por la revelación del exasesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca John Bolton, quien de acuerdo a extractos de un próximo libro filtrados el domingo por el diario The New York Times, afirma que el presidente le comunicó que quería seguir reteniendo la ayuda militar a Ucrania para forzar a ese país a que investigara a Biden y a su hijo, Hunter, por corrupción.
“Responder a un manuscrito no publicado sobre el que puede que algunos periodistas tengan idea de lo que dice, no sé cómo lo llamarían. Yo lo llamaría inadmisible”, recalcó Sekulow este martes.
De acuerdo al diario neoyorquino, Trump le dijo a Bolton en agosto que “quería continuar congelando los 391 millones de dólares de asistencia de seguridad a Ucrania hasta que los funcionarios ucranianos lo ayudaran con las investigaciones” contra los demócratas, incluidos el exvicepresidente Joe Biden y su hijo Hunter, que había trabajado para la compañía de gas ucraniana Burisma.
Los demócratas iniciaron las investigaciones contra el mandatario tras una queja de un informante a los servicios de Inteligencia por una llamada telefónica en julio entre Trump y su homólogo de Ucrania, Volodímir Zelenski, en que el estadounidense le pidió al ucraniano que abriera pesquisas contra los Biden por presunta corrupción en el país europeo.
Según la oposición demócrata, Trump condicionó la entrega de casi 400 millones de dólares en ayuda a Ucrania y también la programación de una reunión con Zelenski en la Casa Blanca a su exigencia de que Kiev anunciara que planeaba investigar a Biden, actual precandidato de su partido a las elecciones presidenciales de este año.