El presidente de la República, Danilo Medina, agradeció al liderazgo político, religioso y empresarial del país por expresar sus condolencias debido a la muerte de su padre, Juan Pablo Medina, quien falleció ayer a la edad de 101 años.
“Quiero expresar mi gratitud en nombre de la familia a los gestos de solidaridad expresados por el liderazgo político, empresarial, especialmente a los miembros del Partido de la Liberación Dominicana. También a los pastores Eliezer y Ezequiel Molina, y los obispos Francisco Ozoria, Benito Ángeles y monseñor Lorenzo Vargas”, dijo el jefe de Estado en el panegírico en representación de la familia Medina Sánchez en el cementerio Cristo Redentor.
Medina destacó que debido a su padre empezó a implementar el programa de Visitas Sorpresa que realiza desde que ganó la Presidencia de la República en el 2012.
“Mi padre fue un hombre de entrega total, con el empecé a sentir las necesidades del campo, a él le debo las Visitas Sorpresa, cuando visitaba a los campesinos junto a él”, expresó el mandatario.
El Presidente también agradeció al personal de Hospiten, donde Juan Pablo Medina permaneció 38 días interno en la unidad de cuidados intensivos. “El trato que mi papá recibió en Hospiten fue inigualable, murió porque era lo que tocaba pero no por falta de atención, ha sido uno de los hospitales que he visto mejor trato”.
El mandatario exhortó a su familia a mantenerse unidos luego de la muerte de su padre. “Mi padre era el tronco, el centro de esta familia, debemos mantenernos unidos. No hay razones para tener tristeza, hemos logrado lo mi padre quería para nosotros”.
También definió a su padre como un hombre íntegro y honesto, atribuciones que inculcó a toda su familia. “Mi padre fue un hombre sin ambiciones, un guerrero que luchó decididamente contra la muerte. Un hombre honesto, trabajador y con una profunidad cristiana. Que siempre estaba dispuesto a darle de comer a quien sea, sin conocerlo”, describió Medina.
Al cementerio Cristo Redentor acudieron figuras del ámbito empresarial, político, diplomático y religioso como el empresario José Luis (Pepín) Corripio, la embajadora de Estados Unidos en el país, Robin Bernstein, el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, el pastor evangélico Ezequiel Molina, entre otros.