Por Edgar Raffa
Uno 60 campesinos de la comunidad de Francisco de Vicentillo, en el Seibo, arribaron a su sexto día de vigilia frente al Palacio Nacional, en pie de lucha y con la esperanza de que el presidente Danilo Medina los reciba para escuchar las demandas de que les regresen las tierras en las que “tanto tiempo han trabajado” y de las que dicen fueron desalojados arbitrariamente.
El vocero de la Asociación de Productores Agropecuarios Mamá Tingó, Silvio Molina, declaró que decidieron tomar esa acción de peregrinación con el objetivo de llamar la atención de las autoridades para que se intervenga en el desalojo que ha calificado de “arbitrario”.
Los peregrinos le atribuyen el violento despojo de las tierras a un hombre llamado Pedro Guillermo Varona, mejor conocido como el Cubano.
“Ese desalojo arbitrario vandálico que se hizo allí, ordenado por el abogado del Estado. De ahí en adelante no ha cesado la persecución, la cárcel, la tortura y la muerte”, expresó el también pastor.
Agregó que Varona parece tener “más fuerza que César el Abusador”. Los peregrinos piden la intervención del jefe de Estado lo antes posible para resolver la situación.
“Haber si Danilo Medina nos recibe, el presidente de nosotros, y hace algo a favor nuestro. Fuimos desalojaos arbitrariamente, abusivamente en una acto vandálico por delincuentes y militares”, afirmó Molina.
La señora Maira Peguero, una de los 60 campesinos que protesta frente a la sede del Gobierno, contó que durante un disparo le segó la vida a su hijo de 12 años.
“Él visitaba una casa del matador. Que el matador es un trabajador de Pedro “el cubano”, me le dio un tiro y me lo mató”, dijo la mujer acongojada mientras contaba la historia.
