Los padres de los estudiantes de la escuela José Tomas Tavares, denuncian que sus hijos reciben docencia en una casa que no está adecuada para esos fines.
Según los denunciantes las habitaciones están divididas en aulas donde carecen de energía eléctrica y según versiones de los maestros algunos estudiantes se han deshidratado.
El denunciante dijo que hay una escuela cercana que está en construcción desde hace 12 años y están cansados de ir a Obras Publicas reclamando la terminación de la edificación pero le hacen caso omiso.