Cleveland, EE.UU.- El poder del bate latino hizo historia esta noche en el Progressive Field de Cleveland, donde los grandes protagonistas fueron los novatos, Pete Alonso, ganador del Derby de Jonrones, y el dominicano Vladimir Guerrero Jr., quien hizo historia al establecer nuevas marcas en el concurso que antecede al tradicional Juego de las Estrellas.
Guerrero Jr., de 20 años, brindó un espectáculo digno de un millón de dólares, porque consiguió nada menos que 91 cuadrangulares en las tres rondas en las que participó, incluida la gran final, que la ganó Alonso (23-22) y se llevó en premio.
Alonso, el toletero de los Mets de Nueva York, aprovechó la fatiga de Guerrero Jr. en la final del Derby de Jonrones y conquistó este lunes el lunes esa competición previa al Juego de Estrellas. Con ello, se embolsó un millón de dólares, casi el doble de su salario para 2019.
Guerrero Jr., el novato de los Azulejos de Toronto, lució con 91 vuelacercas en total, pero visiblemente se quedó sin fuerza en la ronda final, en la que Alonso hizo mejor dosificación del esfuerzo, que fue donde estuvo la clave.
El toletero dominicano había disputado una semifinal que quedará para el recuerdo contra el estelar Joc Pederson, de los Dodgers de Los Ángeles.
Alonso, de 24 años, que juega en la primera base de los Mets necesitaba 23 cuadrangulares para superar a Guerrero Jr. en la final.
Lo consiguió con un batazo entre el jardín izquierdo y el central del Progressive Field de Cleveland, antes de lanzar su bate y abrazar al pitcher que eligió para el concurso, su primo Derek Morgan.
Luego, fue felicitado por los integrantes del equipo de la Liga Nacional, quienes fueron testigos de una muestra de poder como no se había visto jamás en esta competición.
Alonso es el segundo novato que gana el Derby, después de que el jardinero Aaron Judge, de los Yanquis de Nueva York, lo consiguió en el 2017.
Además también es el primer pelotero de los Mets que se lleva la competición en solitario, dado que el primero en conseguirlo fue Darryl Strawberry, en 1986, pero que tuvo que compartir el título con Wally Joyner.
Alonso, a quien se le conoce con el apodo de “Polar Bear”, dijo que lo conseguido había sido algo “maravilloso” que iba a recordar el resto de su vida.
“Esto significa mucho”, declaró Alonso al concluir el concurso. “Hay muchas cosas por las que estuve bateando esta noche. Estoy muy feliz. Estoy tan emocionado. Estoy feliz de poder donar algo de dinero para las causas que quería”.
Alonso está donando el cinco por ciento de su gran premio del millón de dólares al “Proyecto Soldado Herido” y otro cinco por ciento a la “Fundación Tunnel to Towers”.
“Respeto a todos los que ponen su vida en peligro todos los días, y van a trabajar sabiendo que pueden tener que hacer el máximo de los sacrificios”, destacó Alonso. “Hay personas que están haciendo sacrificios todos los días en el extranjero para mantenernos libres y luego hay gente en casa que nos mantiene seguros”.
Alonso fue el verdugo de los peloteros latinoamericanos que participaron en el torneo al vencer en la primera ronda al dominicano Carlons Santana, de los Indios de Cleveland (14-13).
Luego superó al joven venezolano de los Bravos de Atlanta, Ronald Acuña Jr. (20-19), en la segunda y a Vladimir Jr. en la gran final.
Mientras que Guerrero Jr. se quedó a las puertas de una jornada memorable de haber ganado la final, pero sin discusión fue el gran protagonista al batir marcas históricas.
Guerrero Jr. se convirtió como el bateador más joven en competir en dicho evento, logró la mejor marca en una primera ronda y en su debut con 29 cuadrangulares, superando la que consiguió Josh Hamilton, en el antiguo Yankee Stadium, en el 2008.
Después de haber establecida la marca de los 29 cuadrangulares en la primera ronda, en la que Guerrero Jr. batió a Matt Chapman, de los Atléticos de Oakland (13), el toletero de los Azulejos ganó un duelo espectacular ante Pederson con otra marca de 40 vuelacercas por 39 del pelotero de los Dodgers.
Pero el esfuerzo que hizo ante Pederson, quien en la primera ronda había ganado por 21-16 al Alex Bregman, de los Astros de Houston, le iba a pasar factura en la ronda decisiva, aunque su nombre ya había pasado a formar parte de la historia del Derby de Jonrones y del béisbol profesional de las Grandes Ligas.