Ni en el más optimista esperaba el resultado de la puja que convirtió a Armando en la paloma más cara del mundo.
Pedigrí tenía y un exitoso historial también, pero la venta de la “mejor paloma belga de larga distancia de todos los tiempos” superó todas las expectativas al alcanzar un precio de US$1.420.000.
Es una cifra estratosférica si se tiene en cuenta que el anterior récord era de US$426.000.
El campeón de tres de las carreras más importantes del mundo y que se encuentra retirado de la competición, cumplirá cinco años en 2019.
“Fue increíble, una sensación completamente fuera de este mundo“, le explicó a la BBC el presidente de la casa de subastas PIPA, Nikolaas Gyselbrecht, sobre el momento en el que el precio superó US$1 millón.
“Nunca esperamos un precio como ese. Teníamos la esperanza de estar entre US$500.000 y US$600.000. Solo soñábamos con US$700.000”, agregó.
Compradores de China
Gyselbrecht comentó que fueron dos compradores de China los que se enfrascaron en una intensa puja que elevó el precio de US$600.000 a US$1,25 millones en poco más de una hora.
Para poner en perspectiva eta venta récord hay que considerar que el costo de una paloma de carrera ronda los US$3.000.
Pero se sabía que Armando podía generar un interés mucho mayor luego de sus triunfos en las últimas tres carreras que disputó: el Campeonato de Palomas Ace en 2018, la Olimpiada de Palomas en 2019 y la clásica de Angulema en Francia.
Si bien los días de competencia de Armando ya terminaron, el presidente de PIPA explicó que puede seguir teniendo crías hasta por lo menos los 10 años y vivir hasta que tenga 20.
Y es la posible participación de su descendencia en futuras competencias lo que resultó atractivo para su nuevo dueño.
