La desesperación se apodera de familiares de decenas de personas que trabajaban en la fábrica PolyPlas y aún no aparecen ni vivos ni muertos.
La angustia es mayor debido a que ni los ejecutivos de la empresa, militares y los organismos de protección civil ofrecen informaciones y tampoco les permiten acercarse a la zona cero.
Inclusive, agentes policiales lanzaron gas lacrimógenos a familiares que se acercaron a la zona de desastre en busca del paradero de sus parientes.
Los ejecutivos de PolyPlas no han ofrecido un listado del personal, pese a que en la mañana del jueves realizaban un pase de lista.
Ni siquiera a los medios de comunicación se le informa de los hallazgo, ni los nombres de las víctimas, exceptuando los que recibieron asistencia médica.
Las autoridades reportan, por el momento, cuatro muertos y alrededor de 85 heridos, pero no se sabe el número de } desaparecidos.
Esto implica que presumiblemente el número de víctimas podría aumentar a medidas que se van retirando los escombros.
El presidente de PolyPlas, Manuel Diez Cabral, informó que fijarán ofrecerá un informe luego que las autoridades concluyan.
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