Huawei sigue acumulando prohibiciones en diferentes países.
Nueva Zelanda se convirtió este miércoles en el último país en bloquear una propuesta para utilizar equipos de telecomunicaciones fabricados por la empresa china Huawei debido a preocupaciones de seguridad nacional.
La empresa de telecomunicaciones Spark quería usar equipos Huawei en su red móvil 5G en Nueva Zelanda, pero una agencia de seguridad del gobierno dijo que el acuerdo conllevaría riesgos significativos.
La medida es parte de un creciente impulso contra la participación de empresas de tecnología chinas en materia de seguridad.
¿Cuáles son los miedos?
Varios gobiernos desconfían de la tecnología china porque temen que Pekín obligue a compañías como Huawei a ayudar a las autoridades a obtener acceso a secretos industriales y otra información confidencial.
En concreto, existe preocupación por el riesgo de espionaje por parte de China, alegan algunos expertos.
Tom Uren, miembro visitante del Centro Internacional de Política Cibernética en el Instituto de Política Estratégica de Australia, dijo que el gobierno chino “demostró claramente la intención de robar información durante muchos años”.
Los vínculos estrechos entre las empresas y el gobierno también alimentaron las preocupacionesde que China puede intentar “utilizar a las empresas vinculadas con el estado para permitir sus operaciones de espionaje”, añadió Uren.
Esas preocupaciones se vieron exacerbadas por las nuevas leyes introducidas el año pasado que requieren que las organizaciones chinas colaboren en los esfuerzos de inteligencia nacional.
La combinación de estas leyes y los antecedentes de espionaje aumentaron el peligro percibido por los países de usar compañías como Huawei y ZTE en infraestructura nacional crítica.